Con notas justas
Quiero darle a mi verso la hidalguía
que no ameritan ni soles ni paisaje
para emprender con él un largo viaje
que represente un reto a la osadía.
Porque solo así honrar podría
a tu belleza lucida con encajes
y decirte morena sin ambages
que bella es la visión que me atraía.
Tan joven tan dulce tan entera
con tonos de flor en primavera
tocando la nota más precisa.
Te dejo mi afecto más sincero
pues mucho se aleja mi sendero
del tuyo que es cántico de brisa.
Fer Amaya
Cuando todos somos dolientes
Esos ayes del mar me desconsuelan
me hacen saber que ya no estás hermano
en los sueños del sol es muy temprano
y los vientos del sur mi canto asuelan.
Al buscarte mis ángeles desvelan
y su trono de pesar lo siento a mano
como no extrañar tu voz querido hermano
si otras voces por igual se velan.
Y condolido el corazón asume
todos los duelos que el presente sume
tan sólo a uno sin dejar a un lado.
Es que el dolor al corazón lo escuece
y su arenga sufrida le merece
ofrecer todos juntos el costado.
Fer Amaya
Responso de luz meridiana
Bendito Dios que suspiró y naciste
bendito pues por su pasión cimera
en su bondad te procreó y creciste
divina luciente y primavera.
No asumo que mi vida es placentera
pero tampoco que es austera y triste
yo simplemente digo que me hiciste
concebir el amor tal como era.
Como luz que enceguece los sentidos
hasta hacerlos por suerte tan unidos
que juntos me ponen a resguardo.
Los colores del mar de tu figura
el perfume sin par de tu hermosura
especialmente para mí los guardo.
Fernando Amaya
Exequias del odio
Veo al odio
caminar a sus anchas por el mundo,
con atavíos de gala,
con un cortejo de pompa
mal disimulado.
El odio abre los brazos
y apresa a quienes se fían de él,
a seres que amamos,
a voces inocentes.
Tenemos que poner distancia
entre el odio y nosotros,
hacer que los nuestros
también lo hagan
para no lamentar pérdidas.
En procura
de solo oficiar las exequias
del miedo, los rencores y la duda.
Amarnos es urgente y necesario
porque el odio no para en mientes
y toma por asalto
a quien se descuida y se fía de él.
Es esta una convocatoria al amor
a fin de dejar al odio sin opciones, defenestrado,
abandonado e inútil.
Fer Amaya
Canción a la vera del mar
Eres esa calandria que me mima
aún cuando no oiga su canto
eres ese plumaje que acaricia
mi devota visión de tu milagro.
Una delicia de Plumaje fresco
que se desliza por mi frente ajada
solo por eso con afán te ofrezco
la briosa libertad de esta tonada.
Que se escuche el plañir de sus tambores
el canto de su voz enmohecida
la suma de todos los honores
que le piden aún hablar de vida.
Eres esa calandria que me encanta
con su recia bondad de izar un nido
ya lo ocupo por dios mi dicha es tanta
que te vivo por siempre agradecido.
Fer Amaya
Aun es agosto
Ah malvada ilusión por qué apareces
en mi noche feliz sin avisarme
que no sabes saber que hasta a matarme
va tú filo nomás con sus dobleces
Ah malvada ilusión porque te creces
cuando llenas mi ser puedes ahogarme
sin que sepa mi fe ya rescatarme
atorado en el mar lleno de peces.
Hoy te digo ilusión
que es embustera
tu mirada acechando desde fuera
a mi noble saber de amar sin pausa.
Te destrono
además de no quererte
cuando alejo tu nombre de mi suerte
y no te hago saber ya de mi causa.
Fer Amaya
Cipolite 